Mayoría de jóvenes rurales, empleados en la informalidad

Informe de la FAO sobre trabajo digno

Laura Poy Solano

Periódico La Jornada

Lunes 8 de febrero de 2016, p. 19

Se calcula que en el mundo 37 por ciento de los desempleados (73 millones) tienen entre 14 y 27 años de edad; quienes logran insertarse en el mercado laboral lo hacen en condiciones precarias, pues 24 por ciento de los trabajadores pobres son jóvenes.

Para los residentes en las zonas rurales de países en vías de desarrollo las oportunidades de empleo son aún más escasas, y las condiciones en que logran laborar casi siempre son precarias, revela la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

Envejecen agricultores

En un reporte sobre empleo y condiciones dignas para los jóvenes, el organismo multinacional destaca que actualmente en el planeta la mayor parte de los alimentos son producidos en los países en vías de desarrollo por pequeños agricultores que están en proceso de envejecimiento.

Luego de que la ONU lanzó su Iniciativa Global sobre Empleo Decente para los Jóvenes, 19 organizaciones internacionales se sumaron para impulsar un desarrollo económico inclusivo y sostenible pero que también permita acceder a un empleo decente para todos.

La FAO forma parte de este esfuerzo mediante un eje sobre juventud en la economía rural, por lo que destaca la importancia de promover oportunidades de empleo en la agricultura para este sector poblacional.

“La mayoría de los jóvenes rurales están empleados en la economía informal como trabajadores familiares, agricultores de subsistencia, microempresarios con su propio negocio casero o trabajadores no cualificados”, advierte.

Las fuentes laborales y las oportunidades empresariales, agrega, aún son limitadas, en particular para quienes viven en las zonas rurales.

Por lo general, destaca, “ganan salarios bajos, se emplean a través de acuerdos laborales eventuales o de temporada y se enfrentan a condiciones laborales inseguras, a menudo explotados”, situación que los obliga a emigrar a las urbes o al extranjero.

Además, los que viven en zonas rurales enfrentan otros desafíos y limitantes, como el “acceso insuficiente al desarrollo de habilidades y la educación; a recursos como la tierra, y los bajos niveles de participación en procesos de toma de decisiones”. Suelen quedar excluidos de las instituciones que ofrecen acceso a servicios financieros como créditos, ahorro y seguros, situación que limita aún más su capacidad de participar en el sector.

La FAO advierte que el número de jóvenes en el planeta sigue creciendo.

En la actualidad suman mil 200 millones de personas, es decir, 14 por ciento de la población mundial. De ellos, casi 88 por ciento viven en países en desarrollo, cifra que se prevé aumente en las próximas décadas.

http://www.jornada.unam.mx/2016/02/08/politica/019n1pol